La diputada de Queensland, Brittany Lauga, realizó una denuncia por sobre sido drogada y agredida sexualmente durante una salida nocturna en Yeppoon, Australia.
La confirmación de sustancias en su sistema que ella no consumió conscientemente desencadenado una investigación policial, y varios relatos en redes sociales de mujeres perjudicadas en el abuso. Lauga, quien se desempeña como ministra adjunta de salud del estado australiano, buscó ayuda policial y hospitalaria el 28 de abril después de su aterradora experiencia.
Por lo tanto, este caso se suma más a los problemas de violencia en dicho país, donde se registran preocupantes números de asesinatos de mujeres.
Este patrón de violencia se subrayó aún más con el trágico incidente protagonizado por Joel Cuachi, quien asesinó a seis personas en un centro comercial de Sydney, cinco de ellas mujeres, en un ataque que el comisionado de policía de Nueva Gales del Sur calificó de enfocado hacia las mujeres.
Ante esta creciente problemática, el primer ministro australiano, Anthony Albanese, reconoció la violencia doméstica como una «crisis nacional» y se comprometió a combatir los contenidos misóginos en línea.
Aparte, Albanese enfatizó la necesidad de cambiar la cultura, actitudes y el sistema legal para abordar de manera efectiva la violencia de género.
Asimismo, la diputada, solicitó un tiempo para sanar física y emocionalmente, pidiendo privacidad durante este período difícil. Por otro lado, ella ha recibido muestras de apoyo y solidaridad de parte de sus colegas y del público en general.
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