El paso devastador del huracán Beryl por el Caribe oriental ha dejado un rastro de destrucción y pérdidas humanas. Con un total de siete personas fallecidas hasta el momento, tres en Granada, una en San Vicente y las Granadinas, y tres en Venezuela, la región se enfrenta a una situación de emergencia.
Además, en el país, más de 80 mil viviendas han sido afectadas, y cientos de familias han debido ser desalojadas y trasladadas a refugios temporales.
En medio de la tragedia, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, resultó herida tras un accidente provocado por la caída de un árbol sobre el vehículo en el que se desplazaba.
Mientras tanto, el huracán Beryl avanza hacia Jamaica, donde se han tomado medidas preventivas como el cierre del aeropuerto internacional y oficinas gubernamentales no esenciales.
Las autoridades temen que el núcleo del huracán pase cerca o sobre la isla, especialmente en áreas como Kingston y los puertos del sur.
También México ha activado el plan de emergencia. La población se prepara comprando suministros o preparando sus casas para las fuertes tormentas y rachas de viento que están por venir. «Quiero decirles que estamos tomando las provisiones necesarias, incluyendo combustible, repuestos y equipos, y el personal del gobierno estatal y federal está listo para ayudar a la gente», ha dicho Laura Velázquez, Coordinadora Nacional de Protección.
En Puerto Rico, el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales ha informado del cierre de varios balnearios en el norte y el suroeste debido a las peligrosas condiciones marítimas. «Las condiciones no están aptas para bañistas», ha urgido en su mensaje, mientras que el Servicio Nacional de Meteorología ha emitido advertencias de inundaciones costeras y corrientes marinas, así como para embarcaciones pequeñas.
Con información Antena 3
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