El sector inmobiliario en Venezuela atraviesa una notable desaceleración en ventas y alquileres, influenciada por la incertidumbre política generada por el proceso electoral.
Roberto Orta, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, señala que esta situación ha llevado a los potenciales compradores a posponer sus decisiones, resultando en una disminución significativa de la oferta de inmuebles durante el segundo trimestre del año.
La conflictividad política ha creado un ambiente de cautela que afecta tanto las transacciones de compra como las de alquiler.
Ante este panorama, la Cámara Inmobiliaria ha presentado varias propuestas legislativas con el fin de revitalizar el mercado y atraer inversiones.
Entre estas iniciativas se encuentra la reforma de 20 artículos de la Ley de Arrendamientos de Viviendas, que busca facilitar una oferta masiva de viviendas en alquiler y aprovechar los inmuebles desocupados debido a la diáspora venezolana. Esta propuesta no solo beneficiaría a los propietarios que residen fuera del país, sino también a jóvenes profesionales y comunidades con altas tasas de morosidad.
Asimismo, Orta destacó la importancia de la Ley del Deudor Hipotecario, que pretende fomentar el financiamiento de viviendas a través de la banca y en moneda extranjera. También se propuso una Ley contra la Estafa Inmobiliaria, que busca regular las ganancias de los promotores en proyectos privados.
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