La organización de derechos humanos Justicia, Encuentro y Perdón (JEP) emitió un comunicado este viernes, denunciando las graves irregularidades que enfrentan los adolescentes detenidos en Valencia tras las protestas que siguieron a las elecciones del 28 de julio. Según la ONG, se está forzando a estos jóvenes a confesar delitos que no cometieron.
A través de su cuenta en «X», JEP reveló que las familias de los menores han reportado situaciones de coacción y amenazas, lo que ha llevado a algunos adolescentes a experimentar conmociones psicológicas, episodios de estrés y ataques de pánico. El comunicado subraya la falta de acceso a defensores legales de confianza, lo que agrava la angustia que sienten tanto los jóvenes como sus familias.
JEP hizo un llamado urgente a las autoridades para que tomen medidas que pongan fin a lo que consideran «atropellos y vulneraciones a la dignidad» de estos adolescentes. «Exhortamos al sistema de justicia a evitar que se sigan cometiendo estos abusos», concluyeron en su publicación.
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