La presidenta de Perú, Dina Boluarte, y el canciller Elmer Schialer han declarado que el país no reconocerá a Nicolás Maduro como presidente de Venezuela, argumentando que el verdadero ganador de las elecciones del 28 de julio es Edmundo González. Durante una reciente rueda de prensa, Schialer afirmó que si Maduro asume nuevamente el poder el próximo 10 de enero, se situaría «fuera de la legalidad» de su país.
El canciller enfatizó que, hasta ahora, el gobierno peruano ha estado trabajando intensamente con aliados internacionales para garantizar que González, quien actualmente reside en Madrid y ha solicitado asilo político, asuma la presidencia. «Lo que quisiera que pase es que el 10 de enero el señor Maduro le entregue el poder al verdadero ganador de las elecciones», manifestó Schialer.
La posición de Perú se basa en la premisa de que los resultados electorales anunciados por las autoridades venezolanas no son válidos. «Las víctimas de la situación en Venezuela han hablado, y lo que toca ahora es respetar el mandato dado por el pueblo», añadió el canciller.
Schialer también destacó la importancia de la comunidad internacional en la solución de la crisis venezolana, mencionando a Estados Unidos, China, Rusia e Irán como actores clave en el proceso. A pesar de la complejidad del panorama, reiteró que Perú no puede aceptar a Maduro como un presidente democráticamente elegido.
Este rechazo al reconocimiento de Maduro marca un cambio en la política exterior de Perú, que en el pasado había mantenido una postura más ambigua. La comunidad internacional sigue atenta a los desarrollos en Venezuela, mientras la situación política continúa siendo tensa y llena de incertidumbre.
Con información de EFE
