Francia se convirtió este lunes en el primer país del mundo en incluir el derecho al aborto en su Constitución.
El Parlamento votó a favor de modificar la Constitución de 1958 para consagrar la «libertad garantizada» de las mujeres a abortar.
El artículo 34 de la Constitución francesa ahora dirá que «la ley determina las condiciones en las que una mujer tiene garantizada la libertad de recurrir al aborto”.
Según las encuestas, alrededor del 85% de la población apoya la reforma
Antes de la votación, el primer ministro, Gabriel Attal, afirmó ante el Parlamento que el derecho al aborto seguía «en peligro» y «a merced de quienes toman las decisiones» y por ello justificó el esfuerzo del gobierno para protegerlo.
Ante la votación en el Congreso francés para consagrar el aborto como libertad garantizada en la Constitución francesa, Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional, ha declarado:
“Esta histórica votación convierte a Francia en el primer país que consagra el aborto en su Constitución y tiene una importancia enorme dado el retroceso de este derecho esencial en el mundo. Proteger la libertad para acceder a un aborto proporciona un importante bastión”.
«En el momento de la votación, la torre Eiffel debería brillar. Es un mensaje importante para el mundo», señaló Anne-Cécile Mailfert, activista de la Fondation des Femmes, una organización de defensa de los derechos de la mujer.
Derecho Constitucional
El cambio constitucional en Francia fue impulsado por los recientes acontecimientos en Estados Unidos, donde el Tribunal Supremo suprimió el aborto como derecho en 2022 y lo dejó en manos de las legislaciones de cada estado que ahora puede volver a prohibir el procedimiento.
La protección del derecho al aborto en la Constitución francesa ha sido bien recibida por muchos en el país.
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