Miles de personas se movilizaron este sábado en Valencia, en el este de España, para denunciar la gestión del fenómeno meteorológico conocido como dana y exigir la dimisión del presidente regional, Carlos Mazón, del conservador Partido Popular.
Esta manifestación se produce un mes después de que el temporal dejara más de 220 víctimas mortales en la zona y sigue a una masiva concentración que reunió a 130.000 personas hace tres semanas.
Los organizadores de la protesta afirmaron que los pueblos y ciudades afectados “continúan destruidos” y acusaron al Gobierno valenciano de estar “incapacitado moral y éticamente” para llevar a cabo la reconstrucción. “Son el gobierno de la destrucción, militarizado, que solo está dando dinero a las empresas castigadas y vinculadas a casos de corrupción”, añadieron.
Los manifestantes exigieron “verdad, justicia y reparación”, señalando que, un mes después del temporal, muchas personas aún no pueden cocinar un plato caliente en sus hogares y casi 20.000 alumnos no han regresado a la normalidad en sus centros educativos. La movilización fue convocada por sindicatos, organizaciones civiles y grupos de izquierda.
La protesta se llevó a cabo un día después de que una treintena de municipios valencianos afectados por la dana también salieran a las calles para exigir la dimisión de Mazón, criticando su “nefasta gestión” durante la emergencia
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