Las intensas lluvias, inundaciones y mazamorras han dejado hasta la fecha un saldo de 16,113 familias afectadas en siete departamentos de Bolivia, con un trágico total de 14 personas fallecidas.
El viceministro boliviano de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, informó este domingo sobre la grave situación que enfrenta el país.
Según el reporte, tres municipios de La Paz, Apolo, La Asunta y Luribay, ya se han declarado en desastre municipal. Además, se han identificado otros 31 municipios afectados, 175 comunidades impactadas, y un total de 10,880 familias damnificadas, sumando otras 5,113 que también han sufrido las consecuencias de las lluvias.
Calvimontes mencionó que hay una persona desaparecida en el municipio de Chimoré, Cochabamba, que aún no ha podido ser localizada debido al caudal y la palizada en el río. “Nuestra Capitanía de Puerto Villarroel ha iniciado la búsqueda, pero las características del río están impidiendo el acceso a la zona”, explicó.
De los 14 fallecidos, cinco se registraron en Chuquisaca, de los cuales tres perdieron la vida por descargas eléctricas. En La Paz, dos personas fallecieron, una de ellas por un rayo. También se reporta un fallecido en Tarija, otro en Potosí y cinco en Cochabamba.
El viceministro destacó que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) ha emitido alertas que han puesto en “apronte” a todas las unidades militares ante la posibilidad de más incidentes durante este periodo de lluvias. Se estima que las precipitaciones continuarán con gran intensidad, y se ha emitido una segunda alerta por intensas lluvias y descargas eléctricas para cinco departamentos, advirtiendo que todos los departamentos del país tienen probabilidades de verse afectados.
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