El fiscal regional de la Fiscalía Metropolitana Sur y coordinador del Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH) de Chile, Héctor Barros, afirmó el 20 de enero que hay indicios que sugieren que el gobierno de Nicolás Maduro podría estar involucrado en la muerte del exteniente Ronald Ojeda, considerándolo un crimen de carácter político.
En una entrevista con Radio ADN, Barros explicó que, según la investigación, “detrás del crimen de Ronald Ojeda está el gobierno venezolano”. Ojeda, quien fue un exteniente del Ejército venezolano y un activo opositor al régimen de Maduro, participó en un fallido golpe de Estado antes de trasladarse a Chile, donde continuó su lucha política.
El fiscal recordó que Ojeda había regresado a Venezuela en diciembre, justo antes de su asesinato, para intentar organizar un nuevo levantamiento contra el gobierno.
La rápida ejecución del crimen, que ocurrió entre 24 y 72 horas después de su secuestro, junto con el perfil político de Ojeda, llevó a las autoridades a concluir que su asesinato está vinculado a su oposición al régimen venezolano.
Asesinato de Ronald Ojeda fue un crimen político
Barros aseguró que el asesinato de Ronald Ojeda no fue un secuestro común. “Este crimen tenía un móvil político no se trató de un caso de extorsión ni de un pedido de dinero a cambio de la liberación de la víctima por parte del Tren de Aragua”, dijo.
“Yo sigo sosteniendo que el crimen de Ronald Ojeda es un delito político. El perfil de la víctima, un exteniente del Ejército venezolano y un activista en contra del gobierno de Venezuela, es claramente político”, dijo.
Continúo: “No hubo ninguna solicitud de rescate, que es lo típico de los secuestros cometidos por grupos como el Tren de Aragua, que buscan obtener dinero a través de sus actividades criminales. En este caso, no hubo esa motivación. Lo que ocurrió con Ronald fue un sicariato, pero también una contratación del Tren de Aragua para secuestrarlo y asesinarlo”.
Con información El Nacional
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