La reciente «Operación Frontera», acordada entre el gobierno mexicano y la administración de Donald Trump, ha resultado en la detención de 746 personas en diversas localidades del país. Esta operación, que busca frenar la migración ilegal y el tráfico de personas, también ha revelado la existencia de túneles utilizados para el contrabando.
Las autoridades mexicanas han llevado a cabo operativos en puntos estratégicos, logrando desmantelar varias redes de tráfico de personas. Durante estas acciones, se encontraron túneles subterráneos el cual se cree que se utilizaban para el cruce clandestino de migrantes hacia Estados Unidos.
El gobierno mexicano ha enfatizado su compromiso de colaborar con Estados Unidos en el control de la frontera, destacando la importancia de abordar las causas profundas de la migración. Sin embargo, la operación ha generado críticas de organizaciones de derechos humanos, que advierten sobre el riesgo de violaciones a los derechos de los migrantes detenidos.
La situación en la frontera continúa siendo un tema delicado, con ambos países trabajando para establecer políticas efectivas que equilibren la seguridad y el respeto a los derechos humanos. Las autoridades han anunciado que seguirán monitoreando la situación y realizarán más operativos en el futuro.