En un mundo marcado por la pandemia y conflictos bélicos, la economía global ha demostrado una resistencia inusual, con la inmigración desempeñando un papel crucial.
Según el economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, «la inmigración ha sido fundamental para la invulnerabilidad de varias economías avanzadas al aumentar la oferta laboral y enfriar la presión en el mercado laboral post-pandemia» manifestó el financista en una entrevista en EFE.
A pesar de los discursos proteccionistas, estudios del FMI indican que la inmigración es un beneficio neto para las economías receptoras al estimular la innovación y aumentar la oferta laboral, acertó Gourinchas.
Por otro lado, en las reuniones de primavera del FMI y el Banco Mundial, destacó un aumento del 1% en la fuerza laboral, gracias a la inmigración que se podría añadir 20 puntos básicos a un crecimiento mundial para 2030.
Aunque la economía global muestra resistencia, persisten aún preocupaciones sobre un crecimiento a medio plazo, especialmente en economías emergentes y en el desarrollo.
Asimismo, la desigualdad entre países pobres y avanzados es un problema creciente, y se destaca la importancia de las organizaciones multilaterales para abordar esta brecha.
» Mejorar el clima macroeconómico, atraer inversiones extranjeras y reducir niveles de deuda son medidas clave para impulsar el crecimiento económico en las economías menos desarrolladas» así finalizó el economista.
También nombró el conflicto de tensiones geopolíticas como el riesgos en Oriente Medio hacia las disputas actuales que se presentan en ese territorio.
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