La situación ambiental en el país es preocupante, con graves problemas que incluyen la deforestación, la minería y los derrames petroleros.
Según el ingeniero forestal José Lozada, la tasa de deforestación en el país ha aumentado significativamente en los últimos años, alcanzando las 200 mil hectáreas al año en 2022, en comparación con las 120 mil hectáreas por año en 2010.
Esta tendencia representa un retroceso a niveles de deforestación similares a los de la década de 1990.
Las principales causas de la deforestación son la ganadería y la agricultura anárquica, que están teniendo un impacto devastador en los ecosistemas forestales del país. Aunque la minería también contribuye a la deforestación, su impacto es menor en comparación con las prácticas agropecuarias.
La pérdida de bosques no solo afecta a la biodiversidad, sino que también genera consecuencias negativas para el clima y los ecosistemas, incluyendo el calentamiento global, la escasez de agua y deslaves durante las temporadas de sequía y lluvia.
Estos deslaves pueden ocasionar daños a la infraestructura, destruir puentes, casas y, lamentablemente, provocar pérdidas de vidas humanas.
Con información de Radio Fe y Alegría
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