El teniente general Ígor Kirílov, jefe de las tropas de defensa radiológica, química y biológica de Rusia, murió este martes en Moscú en un atentado con bomba.
El Comité de Instrucción de Rusia (CIR) informó que un artefacto explosivo equivalente a 300 gramos de trilita, oculto en un patinete eléctrico cerca de su domicilio, fue detonado a distancia alrededor de las 06:00 hora local (03:00 GMT), causando la muerte de Kirílov y su ayudante.
La explosión fue tan potente que destrozó ventanas en las tres primeras plantas del edificio.
Fuentes de la investigación, citadas por Kommersant, apuntan a los servicios secretos ucranianos como posibles autores del atentado, una acusación respaldada por una fuente anónima del Servicio de Seguridad de Ucrania, según Ukrinform.
El presidente de la Duma, Viacheslav Volodin, condenó el atentado, calificando a Ucrania de «Estado terrorista» y afirmando que Kirílov, Héroe de Rusia del Trabajo, había contribuido significativamente a la seguridad nacional.
Kirílov, en su cargo desde 2017, era conocido por sus comparecencias públicas, donde a menudo se refería a los «laboratorios biológicos estadounidenses» en Ucrania. Su muerte, ocurrida justo antes de una reunión con periodistas, ha generado una escalada de tensión entre Rusia y Ucrania.
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