Este domingo, el estado brasileño de Minas Gerais se vio sacudido por una tragedia natural que ha dejado al menos siete personas muertas tras fuertes precipitaciones.
Según un comunicado del Gobierno estatal, seis de los fallecimientos ocurrieron en el municipio de Ipatinga, donde un deslizamiento de tierra arrastró y destruyó varias viviendas.
Entre las víctimas confirmadas por el Departamento de Bomberos de Minas Gerais se encuentran un niño de 8 años, un hombre de 30 años y una mujer de 70 años. Además, al menos cuatro personas permanecen desaparecidas, lo que ha llevado a los equipos de Protección Civil a intensificar sus esfuerzos de búsqueda en la zona, en un intento por localizar a posibles víctimas sepultadas por el lodo y escombros.
En el municipio vecino de Santana do Paraíso, se encontró un cadáver, aunque su identidad aún no ha sido revelada.
Las intensas lluvias que azotaron la región durante la madrugada del domingo provocaron 80 milímetros de agua en menos de una hora, lo que llevó a la alcaldía de Ipatinga a declarar un estado de emergencia por un período de 180 días.
El Instituto Nacional de Meteorología (Inmet) ha emitido alertas para ambos municipios, advirtiendo sobre la posibilidad de más lluvias intensas en los próximos días.
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