La mañana de este miércoles, Caracas se ha visto marcada por el cierre de varios accesos hacia la avenida Urdaneta, en respuesta a las movilizaciones convocadas tanto por el Gobierno como por la oposición, un mes después de las controvertidas elecciones presidenciales.
La entrada a la avenida Libertador, especialmente en el municipio Chacao, también fue cerrada, lo que complicó el tránsito en la capital.
Los conductores experimentaron un fuerte congestionamiento vehicular en la autopista Gran Mariscal de Ayacucho, donde se estableció una alcabala de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en los sectores Él Cercado e Izcaragua. Esta situación generó malestar entre los automovilistas, quienes se vieron atrapados en un embotellamiento considerable debido a las revisiones de los vehículos.
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