Según un informe del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM), un docente en Venezuela requiere aproximadamente 34,37 veces su salario mensual para poder cubrir la canasta básica de alimentos. En diciembre, el costo de esta canasta, que incluye 60 productos esenciales, se valoró en 498,47 dólares para una familia de cinco personas.
El salario promedio de los docentes en el país se sitúa en alrededor de 14,50 dólares al mes, lo que representa solo el 2,91% del costo total de la canasta alimentaria, evidenciando un preocupante déficit del 97,09%. Esto significa que una familia venezolana necesita aproximadamente 16,61 dólares al día para adquirir los productos necesarios para su alimentación.
El informe también señala que la inflación se ha acelerado, con una tasa del 14,8% en diciembre, un incremento considerable en comparación con el 12,5% registrado en noviembre. Este aumento se ha visto influenciado por el incremento del precio del dólar estadounidense, lo que complica aún más la situación económica de la población.
Desde marzo de 2022, el salario mínimo en Venezuela se ha mantenido en 130 bolívares mensuales (equivalente a 2,3 dólares), y aunque algunos empleados públicos reciben bonos gubernamentales, estas sumas no son suficientes para cubrir las necesidades básicas.
La situación de los docentes refleja un problema más amplio de crisis económica en el país, lo que plantea serios desafíos para la educación y el bienestar de las familias venezolanas.