El Departamento del Tesoro de Estados Unidos (EEUU) implementó un nuevo paquete de sanciones dirigido a ocho funcionarios del gobierno de Nicolás Maduro, en respuesta a su autoproclamación como presidente de Venezuela. Estas sanciones se dan en un contexto de creciente represión y violaciones de derechos humanos en el país sudamericano.
Entre los funcionarios sancionados se encuentran Héctor Obregón, presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA); Ramón Celestino Velásquez, ministro de Transporte y presidente de Conviasa; y Douglas Rico, director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC). Además, el gobierno estadounidense restringió las visas de aproximadamente dos mil personas vinculadas al oficialismo.
Como parte de las nuevas medidas, también se incrementó la recompensa por información que conduzca a la captura de Maduro y Diosdado Cabello, fijada en 25 millones de dólares cada uno, junto con una recompensa de 15 millones de dólares por información sobre Vladimir Padrino López.
Estas sanciones reflejan el compromiso de Estados Unidos de presionar al gobierno de Maduro y respaldar al pueblo venezolano en su búsqueda de un cambio democrático. La comunidad internacional sigue atenta a la evolución de la situación en Venezuela, donde la crisis humanitaria y política continúa agravándose.
Con información de EVTV