Las reuniones de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) iniciarán este lunes 13 de abril, con un optimismo sobre el crecimiento económico este año, a pesar de la compleja coyuntura global marcada por conflictos en Ucrania y Gaza, así como una creciente polarización geopolítica.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, ha destacado la «resiliencia» y el «alivio» en comparación con el discurso pesimista del año anterior, señalando que se ha evitado una recesión global y estanflación.
Se espera que el informe WEO del FMI muestre cifras de crecimiento mundial ligeramente más fuertes de lo esperado, impulsadas por la robusta actividad en Estados Unidos y economías emergentes.
Esta reuniones anticipa a banqueros centrales, ministros de finanzas, ejecutivos del sector privado y representantes de la sociedad civil para debatir temas como perspectivas económicas, erradicación de la pobreza y eficacia de la ayuda.
En un contexto geopolítico complejo con conflictos en curso y tensiones entre potencias, se discutirá la posibilidad de bajar los tipos de interés, aunque se advierte sobre recortes prematuros que podrían generar nuevas sorpresas inflacionarias.
La reducción de la deuda pública y la refinanciación en países de bajos ingresos serán temas clave, junto con la necesidad de invertir más en proyectos verdes para abordar el cambio climático.
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