Dos jóvenes identificadas como Stephani y Susej, de 19 y 21 años, respectivamente, perdieron la vida de manera trágica en la Ciudad de México. Con el sueño de triunfar como modelos, estas zulianas cayeron en una red de explotación sexual operada por un cártel.
Engañadas y amenazadas, se vieron obligadas a trabajar bajo condiciones inhumanas y a contraer una deuda de 15 mil dólares. Ante la imposibilidad de pagar dicha cantidad, fueron brutalmente asesinadas el pasado 30 de julio.
Los cuerpos de las jóvenes fueron encontrados en un paraje del poblado de Topilejo, en Tlalpan, presentando signos de violencia y quemaduras.
La autopsia reveló que ambas habían recibido un disparo en la cabeza y posteriormente sus cuerpos fueron calcinados.
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