Este jueves 7 de marzo, Estados Unidos instó a los países de Latinoamérica a presionar al gobierno de Nicolás Maduro para que las elecciones presidenciales previstas para el próximo 28 de julio en Venezuela sean libres y democráticas.
De este modo, el encargado para América Latina del Departamento de Estado, Brian Nichols, señaló durante una charla que los plazos que anunció el Consejo Nacional Electoral venezolano (CNE) son muy cortos y que la situación del país suramericano es «profundamente preocupante».
Asimismo, Nichols opinó que los «incentivos» que Estados Unidos y la comunidad internacional puso para que Venezuela celebre unas elecciones democráticas «no han sido suficientes para motivar a Maduro a hacer reformas porque cree que está en riesgo su gobierno».
En ese sentido, avanzó que la Administración de Joe Biden trabajará con la oposición venezolana y con otros países de la región para ver «cómo responder» en caso de que los comicios venezolanos no cumplan con las normas democráticas.
Finalmente, el subsecretario recordó que los vecinos de Venezuela, entre los que citó a Colombia, Brasil y Guyana, tienen procesos electorales «transparentes» y reivindicó que los venezolanos también merecen un sistema así.
Con información de El Nacional