El índice mundial de precios de los alimentos experimentó una ligera disminución en agosto, registrando una caída del 1,1 % en comparación con el mismo mes del año anterior, según informó la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Además, el indicador se situó en 120,7 puntos, un leve descenso respecto a los 120,8 puntos revisados de julio.
La caída en los precios se debió principalmente a la disminución en las cotizaciones del azúcar, la carne y los cereales, que contrarrestó los aumentos en los precios de los aceites vegetales y los productos lácteos.
En particular, el precio de los cereales disminuyó un 0,5 % debido a la reducción de las exportaciones de trigo desde el mar Negro y a un incremento mayor al esperado en la producción de Argentina y Estados Unidos. Sin embargo, el precio del maíz mostró un leve aumento en algunas regiones de Europa y Estados Unidos, impulsado por las olas de calor.
En cuanto a los precios específicos, el arroz aumentó un 0,6 % y los aceites vegetales se encarecieron un 0,8%.
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