El influencer Gianpiero Fusco se defendió sobre los señalamientos dirigidos hacia él y su organización del campamento «La Manada», tras revelarse que Rebeca García y su hermano, Francisco García, actualmente investigados por el Ministerio Público, participaron en una edición de este evento privado.
En un audiovisual, que «Cubito» compartió a través de la red social X (antiguo Twitter), afirmó que la mujer, acusada de ser, junto a Francisco, una presunta acosadora sexual, sí participaron en «La Manada», concretamente en la cuarta edición del campamento, celebrada a inicios de abril: «Fueron dos personas que pasaron todos nuestros filtros porque quien los metió fue su madre».
«Cuando ellos llegaron, supimos que ella y su hermano no estaban bien. Se veía muy rara la situación» comentó el autodenominado «Tigre», quien también dijo que, en consecuencia, optaron por incrementar la seguridad esos días y separar a los García del resto del grupo.
Cubito 🐯 @gianpierofusco Gianpiero Fusco se lanza la siguiente aclaratoria del caso de Rebeca García.#RebecaGarcia pic.twitter.com/VQVuN3O8wo
— Noelia Belén Izarza 🇻🇪🇺🇸 (@myteks) May 7, 2024
Luego de este suceso, el influencer aseguró que comenzó a recibir correos electrónicos bajo el pseudónimo de «Preston Rocks» donde el remitente declaraba su amor hacia él, y responsabilizó a Francisco de ser el autor. «No puedo evitar imaginarnos compartiendo una deliciosa comida, disfrutando juntos de un festín de carne» se lee en uno de los párrafos del mensaje.
Fusco aseveró que le enviaron muchos más «a modo de acoso» e intentaron obtener su número de teléfono manipulándolo. «Nos dimos cuenta que su modus operandi consiste en ir a lugares donde haya aglomeraciones de personas para buscar posibles víctimas» sentenció Gianpiero Fusco.
Los hermanos García son acusados de crear decenas de cuentas en redes sociales, desde donde acosaban a sus víctimas, y también intentar abusar sexualmente de ellos.
