El Gobierno de Panamá ha declarado este jueves que no ha recibido ninguna comunicación, ya sea oficial o no oficial, respecto a una supuesta propuesta del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para enviar migrantes que no sean acogidos en sus países de origen.
A través de un comunicado emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores, el gobierno panameño aclaró que no tiene la obligación de recibir a deportados de otras nacionalidades, salvo aquellos que sean panameños.
La nota oficial subraya el deseo de Panamá de mantener relaciones con Estados Unidos en un marco de respeto mutuo, pero enfatiza que su misión principal es proteger los intereses del país.
En este contexto, el gobierno panameño recordó que ya había rechazado en 2019 la posibilidad de convertirse en un «tercer país seguro» para albergar migrantes que solicitaran refugio en EE.UU, una propuesta impulsada por la primera administración de Trump.
Donald Trump ha prometido llevar a cabo la mayor deportación de migrantes en la historia de EE.UU. tras asumir la presidencia el 20 de enero de 2025.
Según diversas informaciones de medios estadounidenses, el político republicano está preparando una lista de países a los que podría deportar migrantes cuando sus países de origen se nieguen a aceptarlos. Entre los países mencionados se encuentran Bahamas, que ya ha rechazado una propuesta similar, así como las Islas Turcas y Caicos, Panamá y Granada.
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