A pesar de que miles de españoles celebraron la llegada del nuevo año con alegría y tradición, como en la icónica Puerta del Sol de Madrid, las festividades se vieron empañadas por numerosos incidentes violentos en diversas localidades del país.
Según los informes de los servicios de emergencia y las fuerzas de seguridad, se registraron altercados, borracheras e incluso incendios, dejando un saldo de un fallecido y varios heridos.
Uno de los hechos más graves ocurrió en Puente Genil, donde una disputa entre dos grupos, posiblemente familiares, escaló hasta convertirse en un tiroteo que dejó como saldo un hombre muerto y tres heridos.
En Oñate, otra localidad española, un individuo agredió con un cuchillo a cuatro personas durante una discusión en las inmediaciones de un bar, resultando todas ellas heridas. El agresor fue detenido.
En Madrid, a pesar de que la celebración en la Puerta del Sol transcurrió sin mayores incidentes, los servicios de emergencia atendieron un elevado número de llamadas relacionadas con agresiones, intoxicaciones etílicas e incendios.
Las autoridades destacaron el aumento de las llamadas por ruidos y alteraciones del orden público, lo que obligó a desalojar algunos establecimientos nocturnos por exceso de aforo.
Estos lamentables sucesos ponen de manifiesto la necesidad de reforzar las medidas de seguridad durante las celebraciones masivas y promover una cultura de convivencia pacífica.
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