El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) ha presentado su balance del segundo trimestre de 2024, revelando que el sector privado en Venezuela sigue enfrentando desafíos significativos en términos de remuneración. Con un salario mínimo de $200, las empresas han implementado tarifas de bonificación para compensar los bajos ingresos.
En este contexto, Anzoátegui y Nueva Esparta destacan como las entidades con los salarios promedio más bajos, alcanzando solo $93 y $182, respectivamente.
Además, Zulia se sitúa ligeramente por encima con un promedio de $203, mientras que el Distrito Capital y otras regiones reportan una remuneración promedio de $231, lo que representa una leve mejora con respecto al trimestre anterior.
El análisis también mostró que los gerentes en el sector privado ganan un promedio de $497, mientras que los profesionales y técnicos reciben $343. Por su parte, los obreros reportan un ingreso promedio de $209, mostrando un ligero aumento respecto a los $205 del trimestre previo. A nivel nacional, el sector comercio y servicios emplea al 60% de la fuerza laboral, lo que indica una leve recuperación en comparación con el segundo trimestre de 2023.
Sin embargo, esta situación contrasta con el sector público, donde el Gobierno mantiene congelado el sueldo base en 130 bolívares, complementado con bonos que elevan el ingreso total a aproximadamente $130.
A pesar de estas cifras, la realidad económica sigue siendo preocupante. La remuneración promedio del sector privado apenas permite cubrir un 40% del costo de la canasta alimentaria, que se estima en $550,39 según el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM)
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