Richard Grenell, conocido como Ric Grenell, es un destacado diplomático y experto en política internacional de 59 años, que ha ocupado importantes cargos en la administración de Estados Unidos.
Grenell, quien fue embajador de Estados Unidos en Alemania y director de Inteligencia Nacional, ha sido designado por el presidente Donald Trump para abordar algunos de los «puntos más calientes del mundo», incluyendo la crisis en Venezuela y la situación en Corea del Norte.
En su anuncio, Trump destacó que Grenell trabajaría activamente en temas críticos y que su enfoque sería la diplomacia. «La diplomacia está de vuelta», afirmó Grenell en sus redes sociales, señalando que ya había iniciado conversaciones con varios oficiales venezolanos.
El principal tema de discusión durante su visita parece ser la situación de los migrantes venezolanos que han llegado a Estados Unidos huyendo de la crisis en su país.
La administración Trump ha puesto un énfasis significativo en la expulsión de migrantes ilegales, y se espera que Grenell busque avanzar en este aspecto durante su encuentro con Maduro.
Sin embargo, se anticipa que Maduro también planteará exigencias a cambio.
El senador republicano Rick Scott expresó su deseo de que Grenell se concentre en tres puntos clave: exigir el regreso de los estadounidenses secuestrados en Venezuela, garantizar que el régimen de Maduro repatrie a los delincuentes que han llegado a Estados Unidos y encontrar un nuevo país donde puedan reubicarse Maduro y otros altos funcionarios del régimen.
Cabe recordar que esta no es la primera vez que Grenell se reúne con representantes del gobierno venezolano. En 2020, sostuvo encuentros con Jorge Rodríguez, aunque sin lograr avances significativos en las negociaciones.
Un poco fuerte la visita
La visita de Grenell se produce en un momento delicado para las relaciones entre ambos países, especialmente después del reciente canje de prisioneros que involucró la liberación de 34 presos a cambio de Álex Saab, un hombre cercano a Maduro.
