Las solicitudes de asilo en México han disminuido drásticamente en un 44% durante 2024, según datos de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar). Este cambio se produce después de un año récord en 2023, cuando se registraron 140,720 peticiones, lo que posicionó a México como el tercer país con más solicitudes de asilo a nivel mundial, solo detrás de Estados Unidos y Alemania.
En total, se reportaron 78,975 solicitudes en 2024, con Honduras superando a Haití como el principal país de origen de los solicitantes, seguido por Cuba y El Salvador. A pesar de esta caída en las peticiones formales de asilo, la migración irregular ha alcanzado niveles históricos, con más de 925,000 personas detectadas en esta situación entre enero y agosto de 2024.
La saturación migratoria persiste, especialmente en Tapachula, donde se concentran casi dos tercios de los casos de asilo del país. Activistas han señalado que muchos migrantes evitan acudir a la Comar debido a los largos tiempos de espera para la atención, buscando alternativas como la aplicación ‘CBP One’ para gestionar su paso hacia Estados Unidos.
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Sin embargo, la respuesta de las autoridades mexicanas a las solicitudes de asilo sigue siendo insuficiente, con menos de la mitad de los casos resueltos en el último año. A pesar de la disminución en las solicitudes, la situación para muchos migrantes se complica, ya que aún enfrentan desafíos significativos para regularizar su estatus en el país.
El gobierno mexicano ha prometido mejorar la atención a quienes buscan quedarse en México, pero ha rechazado las solicitudes de aquellos que solo buscan un trámite para continuar su viaje hacia Estados Unidos. La crisis migratoria en la región continúa siendo un tema crítico, con implicaciones significativas para los migrantes de diversas nacionalidades que buscan una vida mejor.
Con información de El Nacional
