El tribunal venezolano encargado del caso de la activista de derechos humanos Rocío San Miguel decidió diferir el inicio de su juicio, programado inicialmente para el 18 de diciembre, ahora reprogramado para el 31 de marzo. Esta decisión se toma debido a la falta de traslado de San Miguel desde su centro de detención hasta el Palacio de Justicia en Caracas.
San Miguel, detenida desde febrero de 2024 en el aeropuerto internacional de Maiquetía, enfrenta acusaciones de «terrorismo», traición a la patria, y conspiración, vinculadas a un supuesto plan para asesinar al presidente Nicolás Maduro. Su defensa ha negado estas acusaciones, argumentando que son infundadas y carecen de pruebas.
El abogado de Rocío San Miguel, Juan González Taguaruco, ha señalado que este aplazamiento viola la ley al exceder los plazos procesales establecidos para la verificación de audiencias. «Llevamos un año sin que se inicie el juicio», afirmó, resaltando la preocupación por el prolongado proceso judicial.
Con información de AFP
