El gobierno de Venezuela anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con Paraguay tras el apoyo del presidente paraguayo, Santiago Peña, al excandidato Edmundo González, quien busca autoproclamarse como mandatario electo de las recientes elecciones presidenciales en Venezuela.
El canciller venezolano, Yván Gil, emitió un comunicado a través de Telegram en el que se informa sobre la decisión de retirar de manera inmediata al personal diplomático venezolano acreditado en Paraguay. En el comunicado, se rechazan de manera categórica las declaraciones de Peña, señalando que su postura ignora el derecho internacional y el principio de no intervención.
Caracas considera que las acciones del gobierno paraguayo son una «reedición de estrategias sin sustento político, jurídico ni social» que han demostrado ser un fracaso, haciendo referencia a intentos anteriores de intervención en la política venezolana, como los esfuerzos del Grupo de Lima.
El gobierno venezolano también lamentó que Paraguay continúe subordinando su política exterior a los intereses de potencias extranjeras, lo que, según ellos, socava los principios democráticos y la voluntad de los pueblos. Esta ruptura de relaciones marca un nuevo capítulo en las tensiones diplomáticas entre Venezuela y varios países de la región que han cuestionado la legitimidad del actual gobierno venezolano.