El 06 de marzo, el jefe de derechos humanos de la ONU, Volker Türk, ha emitido una advertencia alarmante sobre la situación en Haití, calificándola de «más que insostenible». Desde principios del año, se han registrado 1.193 personas asesinadas debido a la violencia de las pandillas en el país caribeño. Esta cifra es impactante y refleja la grave crisis humanitaria que enfrenta Haití.
Türk ha instado a un despliegue urgente de una misión multinacional de apoyo a la policía haitiana, ya que considera que no hay una alternativa realista disponible en este momento para proteger vidas.
La violencia de las pandillas también ha dejado a 692 personas heridas desde el inicio del año, lo que subraya la urgente necesidad de intervención internacional. Por ende, La situación se ha deteriorado significativamente en los últimos días, lo que ha llevado al cierre del espacio aéreo entre Haití y la República Dominicana tras declararse el estado de emergencia.
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Por otro lado, las bandas armadas que controlan amplias zonas del país, han anunciado un esfuerzo conjunto para derrocar al primer ministro haitiano, Ariel Henry, lo que ha resultado en ataques a objetivos estratégicos como el aeropuerto, prisiones y comisarías de policía en la capital, Puerto Príncipe.
Ante esta escalada de violencia, el Consejo de Seguridad de la ONU tiene programada una reunión de emergencia para abordar la crisis en Haití. Türk, quien tiene experiencia trabajando en el país, ha descrito un sistema de salud al borde del colapso, escuelas y empresas cerradas, y niños cada vez más expuestos a la explotación por parte de las pandillas.
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