El mes de enero comenzó en Venezuela marcado por la tragedia y la violencia de género.
Según datos proporcionados por la ONG Cepaz, en los primeros siete días del año se registraron cuatro femicidios y un intento de femicidio en el país, lo que equivale a un caso cada 33 horas.
Estas alarmantes cifras no solo reflejan un problema social grave, sino que también representan historias de vida truncadas.
Detrás de cada caso documentado hay una mujer que ha sido víctima de la violencia extrema, así como el profundo impacto emocional que estas muertes violentas generan en sus familiares y seres queridos.
La organización Cepaz enfatiza que es crucial mirar más allá de las estadísticas y reconocer el sufrimiento humano que se encuentra detrás de cada cifra.
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