La ONG venezolana Justicia, Encuentro y Perdón ha denunciado que la activista Rocío San Miguel, detenida desde febrero de 2024, no ha recibido atención médica adecuada tras sufrir una fractura en el hombro hace más de siete meses. La organización califica esta situación como una grave violación a sus derechos humanos, subrayando la falta de atención especializada que podría poner en riesgo su salud física y emocional.
En un comunicado publicado en X, la ONG destacó que San Miguel no solo enfrenta problemas de salud, sino que también experimenta un retardo procesal inadmisible, ya que su audiencia de juicio ha sido postergada en cuatro ocasiones, con intervalos de casi dos meses entre cada diferimiento. La última audiencia, programada para el 31 de marzo, fue nuevamente aplazada para el 26 de mayo por «falta de traslado» al juzgado.
Rocío San Miguel, presidenta de la ONG Control Ciudadano, fue detenida en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía mientras intentaba viajar con su hija. La Fiscalía la acusa de supuestos vínculos con una «trama conspirativa» contra el gobierno de Nicolás Maduro, afirmando que entregó información sobre sistemas de defensa militar a un embajador de la Unión Europea.
La ONG exigió la liberación inmediata y sin condiciones de San Miguel, resaltando que su detención y el maltrato que sufre son inaceptables según los estándares internacionales de derechos humanos.
Desde hace más de siete meses, la defensora de derechos humanos Rocío San Miguel permanece privada de libertad con una fractura en el hombro que le ha causado pérdida de movilidad en el brazo. A pesar de la gravedad de esta lesión, no ha recibido atención médica especializada, lo… pic.twitter.com/Bd8j0gkrui
— Justicia, Encuentro y Perdón (@JEPvzla) April 18, 2025